viernes, 6 de mayo de 2011

LOS MAQUIS 2ª PARTE.

Continuo en el día de hoy con lo que empecé en el día de ayer,pero antes de continuar con ello,diré que en el termino de alanis,existieron varias partidas de Maquis, de la que tenemos noticia mas concreta fue la que se encontraba por la finca Los Membrillos, donde después de varios intentos, dieron muerte a tres de ellos,dos hombre y una mujer,sus cuerpos fueron acribillados por la guardia civil en la mencionada finca,eran dos hombre y una mujer,pensaba que entre mis papeles encontraría los datos que tenia sobre este enfrentamiento pero no he podido aun dar con ellos,si recuero que siendo alcalde, recibí un día la visita en mi despacho de la hija de uno de aquellos guerrilleros,entregándole toda la documentacion de que disponíamos en el ayuntamiento.
También merodeo por esos lugares el conocido CHATO DE MALCOCINADO,cuya compañera aun hoy en día tiene familiares en la Alanis,intentare documentarme sobre ambos sucesos, ya que forman parte de nuestra historia. A continuación prosigo con el escrito de esta segunda parte sobre LOS MAQUIS.
Entre las armas de las que hablaron en el monte quizás sean dos las mas conocidas,el subfusil STEN ingles,empleado por la guerrilla y el llamado naranjero ultilizado por la guardia civil, un subfusil alemán,el apodo le viene dado porque fue fabricado en Alemania a petición española y la primera remesa fue pagada con un cargamento de naranjas.
Entre 1939 y 1942, unidades del ejercito regular, la legión y los regulares, con apoyo de artilleria, intentaron aplastar la guerrilla, con un rotundo fracaso. Después de este periodo, la guardia civil fue la institucion elegida para combatir la resistencia armada.
Así pues, y a pesar de que Franco estuvo dudando si acabar o no con el cuerpo de la guardia civil - hubo una parte de guardias civiles que fueron fieles a la república - al final le encomendó la misión de acabar con los guerrilleros, aunque fuera librando una guerra sucia. amparados en su uniforme, hubo muchos sujetos que realizaron auténticos desmanes.
La guardia civil creo unas escuelas especiales antiguerrilleras, en lugares de Andalucia, Extremadura y Galicia. A las zonas con fuerte presencia guerrillera fueron destinados los miembros mas energicos y combativos, los que no tenían cuantas pendientes que saldar con la guerra civil o aquellos con menos escrúpulos que querían ascender sin importarles la dura represión sobre los pobladores del lugar.Fue un tiempo de rencores, un tiempo oscuro de miseria moral tanto como material. Sin embargo, con respecto a una gran parte de la guardia civil, habría que matizar algunas cosas.Por una parte, el origen social de la mayoría de los números de la benemerita, era muy parecido a la de los perseguidos. Ganaban lo mismo que cualquier trabajador de la época, 13 pesetas diarias y sus condiciones de vida eran duras, con jornadas de muchas horas. A esto se le sumaba un trato despótico de sus jefes, a los que en ocasiones les costaba motivar a sus hombres en la lucha contra la guerrilla. Bastantes guardias civiles fueron expulsados del cuerpo por no mostrar "suficiente diligencia", en combatir a los del monte. Como en el resto de las instituciones de la España de la posguerra, en la guardia civil había de todo. Desde los que contaban con un orgullo insano el numero de personas que habían matado, hasta los que evitaban los encuentros con los guerrilleros, pensando que tarde o temprano pasarían a Francia y todo se abaría. Algunos guardias cuando marchaban por lugares donde podían encontrarse emboscados los guerrilleros, silbaban o encendían un cigarro para anunciar su presencia. Los huidos por su parte también evitaban el encuentro. Aunque muchas veces pudieron haber matado a muchos mas números, la suya no fue una lucha de tiro en la nunca ni de represalias, con las familias de los guardias.
El teniente general Camilo Alonso Vega, llego a decir en 1955 cuando se despidió como director general de la guardia civil que: " El bandidismo - termino franquista para denominar el fenómeno - tenia gran significado en España, interrumpiendo comunicaciones, desmoralizando al pueblo, arruinando nuestra economía, deshaciendo nuestra unidad y despretigiandonos ante el mundo entero.
Franco mando silenciar los informes sobre la oposicion armada y los esfuerzos que se hacían para combatirla. En 1955, el general Franco comento con su secretario Salgado-Araujo que " los sacrificios de la guardia civil tras la 2ª guerra mundial, quedaron en silencio porque, por razones políticas y de seguridad, era inapropiado publicar las localidades, combates y muertos de aquellos que cayeron en el cumplimiento del deber, en un sacrificio heroico y silencioso.
El hambre se hizo larga, muy larga. no es preciso explicar que venia de antes de la guerra, que era endémica en el país que invento la novela picaresca, pero la guerra había devastado lo poco que había mejorado la República".
Se comían boniatos, algarrobas, y pan negro, alubias y lentejas y cuando se celebraba alguna ocasión señalada, se completaba con Anís del Mono o coñac domecq: hasta el alcohol era un lujo para los pobres.
También se comían pipas. Era una costumbre que trajeron los brigadistas internacionales rusos en la guerra civil. El suelo de los cines de barrio se alfombraba con sus cascaras. el pan era negro o amarillento, y los mecanismos de corrupción del régimen y el estraperlo hacían que en muchas ocasiones no llagara a la gente necesitada.
Con la cartilla de racionamiento no se podía vivir. Muchas fortunas de la España de hoy tienen sus raíces en aquella época y en la falta de escrúpulos.
Hasta 1947 no llegaron Eva Peron, y el trigo y la carne de Argentina, que mitigaron algo la penosa situación del pueblo español. Para matar el hambre y adormecer los nervios, se fumaban Ideales o Celtas cortos. El Camel rubio de 1941 costa cinco pesetas, una fortuna, el cine en sesion doble una peseta y el periodico 15 centimos. Era una época oscura, ensombrecida. Las restrinciones de electricidad resultaban frecuentes. El frío era mas terrible debido a la pobreza, a la mala alimentacion, a la falta de ropa adecuada para combatirlo. La ropa pàrcheada, remendada, dada la vuelta, era la estética de la miseria, del miedo frente a la estética altisonante de la victoria, el contraste de vencedores y vencidos, presente siempre.
Las largas colas de racionamiento de la posguerra se amenizaban con canciones que todo el mundo sabia y tarareaba como " Se vive solamente una vez", en la voz de Antonio Machín:
                                   SE VIVE SOLAMENTE UNA VEZ
                                   Y HAY QUE APRENDER A QUERER Y VIVIR
                                   HAY QUE SABER QUE LA VIDA SE ALEJA Y NOS ALEJA
                                   LLORANDO QUIMERAS
                                   NO QUIERO ARREPENTIRME DESPUÉS
                                   DE LO QUE PUDO HABER SIDO Y NO FUE
                                   QUIERO GOZAR DE ESTA VIDA
                                   TENIENDOTE CERCA DE MI HASTA QUE MUERA

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