La hoja de la acacia esta
toda caída en el suelo
y en rincones se aglomera
empujada por el viento
La punta de la veleta
tiene frío allá en su hierro
y el canto y cal de la torre
se agarraron a su cimiento
Y bien la noche vieja
toda vestida de negro
trescientos sesenta y cinco
tiene esta vieja en su cuerpo
y en el beso de un segundo
nace esta vieja de nuevo,
y así caminan los siglos
empujados por el tiempo-
La noche esta fría, oscura,
le están temblando los huesos.
y ella quiere calentarlos
con el vahído de besos
de los labios que se abren
cuando el amor esta ardiendo.
suenan las doce campanadas
de un reloj muy plañidero
que en el vientre de una torre
tiene su viejo aposento,
aposento que visita
algún viejo relojero,
y que a diario le cuida
su metal,cuerda y acero
y a medida que el martillo
suena en el bronce recio.
los hijos de dios se tragan
igual que pavos hambrientos
de doce a cuarenta uvas
y cada cual mas ligero-
Esta vieja que se va
y que nos deja el recuerdo
de un año que hemos vivido
en la gloria y el infierno,
el infierno de la guerra
y la gloria del progreso.
antes de irse la vieja
ha parido un año nuevo.
Es una vieja fecunda
que pare en poco tiempo,
a unos los pare malos,
a otros los pare buenos,
los buenos con poca vida,
los malos son casi eternos
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